Resulta que en el universo alternativo futurista de mi sueño todos llevábamos unas gafas de realidad aumentada y unas botas antigravedad para volar de un sitio a otro. Nada nuevo, el guionista de mi subconsciente no había inventado nada que no hubiese visto antes. La parte que me ha sorprendido es la interfaz de entrada de las gafas: en lugar de detectar mediante cámaras o sensores el movimiento de los dedos sobre el espacio frente a ellas, se utiliza un touchpad alargado, sujeto al antebrazo de la mano izquierda. El touchpad detecta las pulsaciones de la mano derecha y las gafas representan un cursor superpuesto a la imagen en la posición del dedo, y se maneja como el de un ordenador para hacer click. La parte que me ha gustado es la de introducir texto con una sola mano. Seguramente influenciado por el teclado SureType de la Blackberry, en el que se agrupan las teclas para tener dos letras en cada una y ahorrar espacio, mi subconsciente me ha mostrado un teclado para la mano derecha en el que había dos teclas por letra, con la diferencia de que las letras que se utilizan con el mismo dedo de cada mano estaban en la misma tecla:
gh fj dk sl añ
bn vm c, x. z-
Y hasta ahí ha sido la parte interesante del sueño, que luego ha cambiado a una partida de pistolas de la XBox con mi padre, un poco de surf en hawaii y que la espada de He-Man era la pata de una hormiga (¿?)
*: La distribución de teclado DVORAK es, supuestamente, más rápida que la QWERTY.