Como me encanta twitter y todo lo relacionado con las redes sociales…
Espera, voy a empezar otra vez, porque eso no cuela.
Vamoraver, yo todavía no le veo nada útil al twitter, pero entre el sosio que me engañó para que instalara Übertwitter en la Blackberry y el Víctor que está emprendiendo que da gusto (si no, mirad su web, competencia directa nuestra, y decidme si no mola mil) y me ha convencido de que sirve para «mantener contactos, entretenerse, acceder a información en tiempo real, enterarse de cuando van a cagar los colegas…» y etcétera etcétera; y muchos más etcéteras, millones de etcéteras que a cada segundo hacen que la BlackBerry diga «culín» todo el rato… He perdido el hilo de lo que iba diciendo, pero el caso es que ahora twitteo tres o cuatro veces al día, y he decidido que dichas estupideces merecen ser reflejadas en éste Universo de lo Estúpido que es mi blog, así que he incrustado, acompañando a los compartidos de Google Reader y a las últimas fotos de mi cuenta de Flickr, un pequeño «chisme» con las últimas microestupideces que he escrito ahí.
Si no avanza mucho, es que me ha vuelto a dar la bajona o la mala ostia…