Nuevo MacBook Air

Me triunfa mucho el MacBook de Michelle. Me parece un cacharrito muy útil, sobre todo gastándose 30 euros y ampliándole la RAM a 2 GB: Va muy bien para navegar, correo, conectar por SSH a otras máquinas, es estable, la pantalla se ve de maravilla, le dura la batería como cuatro veces más que a mi HP… por lo que estaba «ilusionado» por la salida de un MacBook nuevo, más «ligerito» … lo que no me imaginaba son sus nuevas prestaciones. Un desencanto.
Conclusión: no sirve para _nada_ práctico. La imágen es de Microsiervos, y ahí llegó de dig o por ahí.

¿¿Lo cualo??


¿Que es un Agaporni? Eso tiene respuesta, mirando la wikipedia: Agaporni.
¿Por qué, si son inseparables, los venden de uno en uno? Eso ya es otra cosa…
Visto en Gandia, en una tienda del puerto, donde también venden un potro…

Pensaba que la luna estaba negra…

…pero es que la luna estaba negra

Teniendo en cuenta que todas en las obras de teatro en las que he estado salían pollas y tetas, en ésta no ha sido lo que más me ha llamado la atención. Ayer fue el último pase de Ciudadano Sade [.doc]:

Ciudadano es la segunda entrega de la “tetralogía clásica”, un proyecto de Ximo Flores que pretende ser una mirada hacia cuatro autores clásicos de la literatura universal que de alguna manera han marcado la trayectoria del Teatro de los Manantiales. Después de Shakespeare y su obra Macbeth, ahora le ha tocado el turno al Marqués de Sade, La obra de Sade elabora desde distintos ángulos una sola imagen absorta: demostrar que el cuerpo es una zona, un mapa, un territorio sobre el cual se pueden ejercer las más crueles experiencias del poder, convierte la escritura en una mera función, en una superficie neutra desde donde se levantan un sinfín de escenarios regidos por el asedio corporal.

Los actores mezclados con el público, música electrónica y visuales en directo y una temática que no deja indiferente. Teatro alternativo, del que está de moda y llena sala de modernos con sombreros y flequilleras con vestidos pop, pero que merece la pena ver porque te hace sentir, y pensar.

Internet con Yoigo en Debian Lenny/Sid con Sony Ericsson K530i


Al fin lo he conseguido. Me ha llevado por lo menos media hora! Siguiendo algunas instrucciones de Alfonso Jiménez: Internet con Yoigo y Ubuntu y haciendo un par de pirulas para descargar las dependencias de wvdial, marraneadas de Ubuntu:

que en Sid están marcadas como Package not available.
Y, de momento, todavía no he conseguido hacerlo funcionar por Bluetooth que, como dice ender, es lo interesante porque puedes recibir llamadas. Sólo por usb, configurando:

~/.wvdial :

[Dialer YoigoUSB]
Modem = /dev/ttyACM0
Phone = *99***1#
Username = »
Password = »
/etc/wvdial.conf

[Dialer YoigoUSB]

Init2 = ATQ0 V1 E1 S0=0 &C1 &D2 +FCLASS=0
Modem Type = USB Modem
Phone = *99***1#
ISDN = 0
Username = »
Init1 = ATZ
Password = »
Modem = /dev/ttyACM0
Baud = 460800

Y, ejecutando sudo wvdial YoigoBT ya conecta él solico a la intenné a una velocidad suficiente como para hacer un ssh y no cagarte en sus muertos.
Queda por supuesto decir que al hacer un dmesg todo tiene que reconocerse correctamente a nivel de núcleo tal que

usb 2-1: new full speed USB device using uhci_hcd and address 2
usb 2-1: configuration #3 chosen from 1 choice
cdc_acm 2-1:3.1: ttyACM0: USB ACM device
cdc_acm 2-1:3.3: ttyACM1: USB ACM device
usbcore: registered new interface driver cdc_acm
drivers/usb/class/cdc-acm.c: v0.25:USB Abstract Control Model driver for USB modems and ISDN adapters
usb0: register ‘cdc_ether’ at usb-0000:00:1d.1-1, CDC Ethernet Device,
usbcore: registered new interface driver cdc_ether

Y que, ante mayores problemas, se puede cambiar el tamaño de la MTU con algo parecido a

ip l
sudo ip link set ppp0 mtu 472

con valores para la mtu entre 472 y 1000. Suerte!

Ron Gilbert vuelve!

Nunca he sido demasiado jugón. Algo de CounterStrike, siempre en LAN, algo de PES, siempre contra otros en la Play, algo de UltimaOnline, con gente en la Red o de Frozen Bubble, contra Michelle… Pero nunca me he dedicado a pasarme un juego yo sólo, o a hacerme un hacha a jugar a algo que no fuese en plan cooperativo o contra otros seres humanos. Excepto un juego: la saga de Monkey Island.

He pasado horas comiéndome la cabeza haciendo que Guybrush consiguiera el tesoro perdido del Big Whoop, el amor de Elaine o El Insulto Definitivo. También he dedicado mis horitas al Indiana Jones and the Fate of Atlantis o al Day of the Tentacle, aunque no he podido con su predecesor Maniac Mansion.
Ésa clase de juegos, de la época en la que la potencia gráfica era insignificante y el dinero iba para el guión, es la única que me ha enganchado. Las aventuras gráficas de toda la vida combinaban la historia de una novela divertida con la habilidad para resolver puzzles absurdos, y las de Ron Gilbert en particular añadían un toque de humor que, para mí, las hace imprescindibles para todo aquel que haya dedicado unas cuantas horas en la época de los 90 a jugar con el PC.

Pues el anuncio es oficial: Del creador de Sam and Max, Monkey Island y demás maravillas del motor SCUMM surge ahora Deathspank, una nueva aventura gráfica en tomos que saldrá a la venta «prontamente» dividida en episodios y que, según el creador, es una mezcla entre Diablo y Monkey Island.

Intentaré, si me queda algún ratito, que sea el próximo juego que pueda decir que «me ha enganchado», aunque de momento lo veo chungo…

Y ahora, algo completamente diferente: Las cosas van guay. Nos sale curro por todas partes, webs, auditorías, aplicaciones y mantenimiento informático. A ver si también nos salen unos sueldos chulos, y podemos empezar a coger gente a la que pagarles un sueldo decente también, y de la que podamos aprender cositas y entonces se podrá decir que todo va viento en popa.